sábado, 19 de febrero de 2011

Simplemente siento.

Cuando uno pierde el rumbo, se encuentra desorientado, confuso, todo parece estar predispuesto del tal manera que nos hace sentir mal. No nos reconfortan aquellas cosas del ayer, ese hábito que hasta entonces fue nuestra vía de escape.
Es entonces cuando, con desespero, nuestro interior se pone en pie de guerra y buscamos, con ansias, algo que nos tranquilice. Buscamos un faro en la oscuridad de la noche, el problema recae cuando hay tanta niebla que no atisbamos ni un resquicio de luz.
"Creo sinceramente que todos los seres humanos somos de la misma naturaleza, tanto a nivel mental como emocional."


Entonces un día te das cuenta de que no eres el único, hay más gente con necesidades de tranquilidad, de sosiego, de paz ... de equilibrio en nuestras vidas.
Las ansias vuelven otra vez, que es lo que he echo mal, porque sigo sientiendo el vacío, como seguramente dijo algún maestro con anterioridad, vacío-lleno-camino...

La inmensidad del Universo es difícil de asumir en el primer asalto. Seguramente habrá formas más fáciles por donde empezar.
Por ese camino, que contienen estás frases de los Ocho Versos, espero halles dirección alguna para que esa niebla que tanto dificulta la visión encuentre un resquicio, por mínimo que sea, para poder ver esa brillante luz.

"Lo importante es tratar de fomentar, en cada uno de nosotros, los aspectos positivos y útiles y tratar de reducir los negativos."


El camino ya comenzó hace mucho tiempo, sólo que aún no lo sabías, no desesperes pues hay muchísima gente con inquietud, con diferentes vistas, opiniones y caminos para "rellenar" ese vacío.

En la Unidad está el camino.

Fuente.

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